Temen alerta de EEEUU haga caer flujo turistas Machu Picchu
La advertencia lanzada la semana última por la embajada
norteamericana en Perú acerca del "peligro de secuestros" a turistas en
el Cusco y Machu Picchu, estiman que podría provocar una disminución de
al menos 30% en la llegada de viajeros a ese destino. De acuerdo con
agencias que trabajan los mercados de Estados Unidos y Europa, a raíz de
la comunicación se han producido cancelaciones de paquetes hacia la
Ciudad Imperial.
Según Madison Barreto Jara, director regional de Comercio Exterior y
Turismo (Dircetur), la alerta de la sede diplomática fue emitida de
forma irresponsable, creó pánico y zozobra, y mella la imagen del Cusco
en todo el mundo.
En 2012, ese territorio peruano fue visitado por 2 millones 880 mil
turistas, de ellos un millón 450 mil extranjeros, de los cuales 30% son
norteamericanos, lo que afianza el temor de que la advertencia, al
dirigirse a ese mercado en particular, provoque una caída en el flujo de
viajeros.
Enrique Velarde, presidente de la Asociación de Agencias de Turismo
de Cusco (AATC), evidenció también su preocupación, aunque señaló que en
estos momentos no se pueden calcular los efectos de la imagen negativa
creada por el anuncio de la embajada estadounidense en Lima.
Por su parte, Fernando Ruiz Caro, expresidente de la Cámara de
Comercio de esa región peruana, dijo que afortunadamente la comunicación
se produjo durante la temporada baja y llamó a aprovechar el tiempo que
resta para la llegada de la alta turística, a fin de contrarrestar sus
consecuencias.
Barreto Jara informó que, de conjunto con el Ministerio de Comercio
Exterior y Turismo de la nación andina, coordinarán acciones para llevar
adelante una campaña internacional que comunique al mundo que los
peruanos garantizan seguridad a todos los visitantes, y dijo que usarán
líneas aéreas, redes sociales y medios de comunicación a fin de que
quede claro que "no hay ningún riesgo para los turistas" en el Cusco.
Un comunicado de las autoridades de ese territorio peruano, que junto
a estas declaraciones publica el diario La República, apunta que la
alerta de Estados Unidos "carece de todo fundamento, ya que las
actividades económicas, sociales, culturales y turísticas en la región
se desarrollan con normalidad y hay garantías para nuestros ciudadanos y
los visitantes".
Pero el Cusco no será el único destino del Perú afectado por la
advertencia, pues la imagen negativa en torno a la seguridad también
provocará un menor flujo de visitantes a la vecina Puno, según el
titular de la Dirección Regional de Comercio Exterior y Turismo
(Dircetur), Manuel Quiñones.
El funcionario local explicó que es común que quienes visiten Machu
Picchu hagan circuito también por el departamento altiplánico, y
consideró que, en este sentido, la reducción de los viajeros hacia el
Cusco repercutirá negativamente sobre Puno.
Recordó que más del 20% de quienes llegan a conocer las islas del
Titicaca son estadounidenses, y llamó a las autoridades peruanas a dar
"muestras evidentes de que en el país la seguridad está garantizada",
para que se revierta la imagen de inseguridad transmitida por la
embajada norteamericana.